Adán y Eva expulsados del paraíso. Alexander Cabanel
De mi columna de EL Libre pensador: Consultas a la Psicoanalista, donde se responden las cartas de consulta de los lectores:
Hola Doctora: Me quiero separar, ya no aguanto más. Es por la familia de ella (supongo que porque lo estoy contando yo, ella diría que es por mi familia). Yo la quiero, de veras, pero cuando me casé con ella, en el lote venía la familia, y yo no contaba con ello antes de casarnos. En navidades y vacaciones, es una pelea continua, cuando coinciden las celebraciones de una y otra familia, ella siempre quiere ir a la de la suya. Si mi familia hace algo, su familia siempre lo hace mejor. A su hermano le hace más caso que a mí. Las decisiones que deberíamos tomar juntos, las toma ella con sus padres. Ya no puedo soportarlo más, el amor tiene sus límites. Por otro lado, me cuesta pensar la vida sin ella, llevamos juntos 9 años, vuelvo a repetir que la quiero, y además tenemos un hijo, no quiero lastimarlo. ¿Qué hacer?
C.M
Hola C.M: Esto que comentas es uno de los problemas más frecuentes en la pareja. Cada uno quiere demostrar que su familia es mejor que la otra. Se transforman en defensores de la ideología de la antigua familia, y por tanto, en rivales. Somos muy narcisistas, la familia de cada uno siempre nos parece la mejor.
Quizás si pudieras pensar que tu familia ahora sois tu mujer y tu hijo, y no la familia de la que provienes. Si abandonaras la competencia con tu esposa, y la tomaras como una compañera y no como una rival. Renunciar a esa dialéctica de perdedores o ganadores. Me preguntarás cómo se hace eso. Para ello, el psicoanálisis es una manera eficaz y posible.
Un saludo, C.M
Dra. Alejandra Menassa
Hola Doctora: Me quiero separar, ya no aguanto más. Es por la familia de ella (supongo que porque lo estoy contando yo, ella diría que es por mi familia). Yo la quiero, de veras, pero cuando me casé con ella, en el lote venía la familia, y yo no contaba con ello antes de casarnos. En navidades y vacaciones, es una pelea continua, cuando coinciden las celebraciones de una y otra familia, ella siempre quiere ir a la de la suya. Si mi familia hace algo, su familia siempre lo hace mejor. A su hermano le hace más caso que a mí. Las decisiones que deberíamos tomar juntos, las toma ella con sus padres. Ya no puedo soportarlo más, el amor tiene sus límites. Por otro lado, me cuesta pensar la vida sin ella, llevamos juntos 9 años, vuelvo a repetir que la quiero, y además tenemos un hijo, no quiero lastimarlo. ¿Qué hacer?
C.M
Hola C.M: Esto que comentas es uno de los problemas más frecuentes en la pareja. Cada uno quiere demostrar que su familia es mejor que la otra. Se transforman en defensores de la ideología de la antigua familia, y por tanto, en rivales. Somos muy narcisistas, la familia de cada uno siempre nos parece la mejor.
Quizás si pudieras pensar que tu familia ahora sois tu mujer y tu hijo, y no la familia de la que provienes. Si abandonaras la competencia con tu esposa, y la tomaras como una compañera y no como una rival. Renunciar a esa dialéctica de perdedores o ganadores. Me preguntarás cómo se hace eso. Para ello, el psicoanálisis es una manera eficaz y posible.
Un saludo, C.M
Dra. Alejandra Menassa
Y si en los tiempos que corren es cada vez mas dificil estar con la mente clara y los sentimientos se confunden!!!.
ResponderEliminarHola Roxana. Gracias por la visita. Si, estar con la mente clara cuesta trabajo. Besos
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